2022 podría ser el año en el que se aprobase la biología como profesión sanitaria

Desde hace más de veinticinco años, los biólogos sanitarios reclaman el reconocimiento de su labor como profesionales sanitarios. Después de muchos años de lucha y tras varios intentos por parte incluso de una Ministra de Sanidad, el colectivo tiene la esperanza depositada en Celia Gómez, la nueva directora general de Ordenación Profesional del Ministerio de Sanidad a la que ya se le ha solicitado una reunión.

Todos los profesionales de la biología que se desempeñan en el campo de la reproducción coinciden en la necesidad urgente de regular la profesión y así poder acceder a una formación homologada o incluso optar a una jefatura de servicio. 

De manera conjunta, la Asociación Española para el Estudio de la Biología de la Reproducción (ASEBIR), el Consejo General de Colegios Oficiales de Biólogos (CGCOB) y la Conferencia de Decanos de Biología (CEBD), apoyados por otras tantas sociedades científicas, como la Sociedad Española de Fertilidad (SEF) consiguieron en enero de 2019 que el Ministerio de Sanidad aprobara regular la Biología Sanitaria como una profesión sanitaria. Sin embargo, la voluntad de la entonces Ministra de Sanidad, María Luisa Carcedo, no se llevó a cabo.

La modificación de la Ley de 44/2003 de ordenación de las profesiones sanitarias (LOPS) para que incluyera a los biólogos sanitarios y trabajadores sociales sanitarios tuvo su correspondiente inclusión en los Presupuestos Generales del Estado de 2021, año para el que se preveía la efectiva dicha reivindicación. 

Hasta la fecha, y así continúa siendo hoy en día, tan solo se consideraba profesional sanitario aquellos biólogos y licenciados afines con una especialidad obtenida vía BIR. La modificación de esta Ley 44/2003 permitiría establecer dos categorías profesionales: biólogos sanitarios con y sin especialidad, pero siendo ambos reconocidos como profesionales sanitarios. 

Además, tal y como afirma, el Dr. Antonio Urriés, presidente de ASEBIR, dicho reconocimiento serviría de base para reclamar la creación de una nueva especialidad, la embriología clínica. Sin embargo, la inclusión de los biólogos en la LOPS nunca se llevó a cabo. En 2021 la nueva dirección de Ordenación Profesional del Ministerio de Sanidad frenó todos los progresos conseguidos, devolviendo a los biólogos y todos sus esfuerzos a la casilla de salida.

“El no haberlo conseguido no creo que sea por no haberlo intentado lo suficiente, sino por la falta de voluntad política” advierte Urriés. Por su parte, Josep Pla, presidente de SEAGen, achaca la problemática a una falta de conocimiento: “Desde ciertos sectores se percibe el rol de biólogo sanitario como intrusismo profesional, cuando realmente tenemos unas competencias totalmente distintas a las de otros profesionales”. 

Menos oportunidades formativas y laborales

Ambos profesionales coinciden en los problemas que derivan de esta falta de reconocimiento profesional.

 “Esta situación no solo supone un agravio comparativo respecto a otras formaciones que sí tienen regulada su actividad profesional, sino que además añade dificultades para una correcta carrera profesional e incluso para optar a una jefatura de servicio” cuenta Urriés. 

Pla también resalta diferencias en cuanto al estatus profesional y añade “de ser reconocidos como biólogos sanitarios podríamos acceder a programas de formación y acreditación homologados, cosa que se traduciría en una mayor calidad de servicio”

Los pacientes también se beneficiarían al tener asegurada la cualificación y formación de los biólogos que realizan las técnicas y tareas asistenciales (embriólogos y asesores genéticos entre otros).  

 “La alta especialización y pluralidad que ha alcanzado el campo de la sanidad ha generado la incorporación en alto número de biólogos, bioquímicos y biotecnólogos en los hospitales españoles en un área tan especializada como es la Reproducción Humana Asistida. Sin embargo, al no ser considerados profesionales sanitarios no podemos ser incluidos en el Registro Estatal de Profesionales Sanitarios, por lo que teóricamente, si se aplicara de forma estricta la ley, no podríamos estar trabajando ni acceder a la historia clínica de nuestros pacientes.” subraya Urriés.

Los biólogos españoles están a la cola de Europa en el reconocimiento de su profesión como facultativos sanitarios

España es uno de los líderes europeos en tratamientos de reproducción asistida.

“Hay cientos de profesionales altamente cualificados trabajando en centros extranjeros que ven peligrar su puesto de trabajo ya que no pueden demostrar que en su país de origen esté regulada su profesión como profesión sanitaria” denuncia Urries. 

Mientras que Josep Pla destaca otro handicap importante como es la necesidad de buscar formación profesional acreditada más allá de nuestras fronteras: “Yo mismo, sin ir más lejos, tuve que emigrar a Reino Unido para poder empezar mi carrera profesional, ya que el no disponer de reconocimiento dificulta muchísimo encontrar trabajo, especialmente en el ámbito público. Por eso, muchos profesionales buscan formarse en un máster en biología de la reproducción humana que les permita acceder a acreditaciones y formación específica en este campo.””.

La reciente incorporación de una nueva directora general de Ordenación Profesional del Ministerio de Sanidad, Celia Gómez, es la esperanza de muchos profesionales para completar el itinerario que la profesión comenzó en 2019 desde las entrañas de las organizaciones que velan por sus derechos. De momento, ASEBIR ya ha solicitado una reunión junto con los responsables del Consejo General de Colegios oficiales de Biólogos, la Conferencia de Decanos, diferentes asociaciones de estudiantes y otras sociedades científicas. Ojalá sea 2022 el año en el que los biólogos consigan su propósito.

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