Impacto de la edad en la fertilidad masculina, esto es lo que sabemos
Por Nicolás Garrido
El tiempo es uno de los grandes obstáculos para la fertilidad en nuestros días. Los especialistas estamos cansados de advertir sobre los problemas reproductivos que el retraso de la maternidad y paternidad está generando en nuestra sociedad. Pero la realidad es que casi siempre tenemos el foco puesto en la mujer. Aunque los hombres también han retrasado su momento de ser padre no sabemos verdaderamente cuál es el impacto de este cambio social sobre su fertilidad.
En los últimos años, el retraso en la paternidad ha ido en aumento debido a una gran variedad de factores sociales. Esto nos ha llevado a los andrólogos a investigar el posible efecto de la edad en el varón. Porque, así como el impacto de la edad materna en el éxito reproductivo y los riesgos para la salud de la descendencia ha sido bien abordado y caracterizado desde hace décadas, el efecto de la edad paterna en la calidad del semen, la capacidad reproductiva y el futuro bienestar del niño aún no ha sido suficientemente investigado, por lo que es menos conocido, probablemente por ser más sutil.
Se han realizado varios estudios para evaluar el efecto de la edad paterna avanzada en la calidad del semen, las tasas de alteraciones cromosómicas en los espermatozoides (aneuploidías) e integridad del ADN del esperma, los resultados reproductivos y la prevalencia de enfermedades en la descendencia. Sin embargo, los resultados de estos estudios son contradictorios, mostrando en algunos casos efectos negativos de la edad paterna avanzada, mientras que en otros aspectos no se observa ninguna asociación.
Sabemos que la edad paterna avanzada se asocia a un mayor riesgo de efectos adversos en la salud de la descendencia
Lo que sí parece ser más obvio, en particular, es que la edad paterna avanzada (EPA) se asocia con una amplia gama de efectos adversos con mayor riesgo para la salud de los niños, como trastornos del espectro autista (TEA), esquizofrenia, acondroplasia y síndromes, como el síndrome de Apert, entre otros, que pueden asociarse a la concepción llevada a cabo con un progenitor varón de avanzada edad.
Todas estas repercusiones parecen estar causadas por un aumento de la acumulación de las mutaciones de novo en los espermatozoides producidos de los progenitores de más edad, a consecuencia de haber estado sujetos a múltiples divisiones celulares a lo largo de la vida del individuo y a la exposición de posibles daños causados por factores ambientales durante este periodo. Uno de los mecanismos responsables se conoce como «selección espermatogonial egoísta», un fenómeno único de la línea germinal que conduce a la expansión clonal de las mutaciones con el paso del tiempo.
Queda mucho por hacer para aclarar el efecto de la edad masculina en los resultados reproductivos en una sociedad con un claro retraso en la paternidad. El más importante, quizás, determinar el impacto o no de la edad masculina en los resultados reproductivos, así como establecer un umbral de edad óptimo. Esto sería fundamental para realizar un mejor asesoramiento de las parejas que acuden a una clínica para someterse a un tratamiento de reproducción asistida o incluso preservar su fertilidad a edades más tempranas.
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