La Inteligencia Artificial es una aliada en una medicina reproductiva más precisa
La inteligencia artificial ha irrumpido con fuerzas en casi todas las áreas de nuestra vida, entre ellas la medicina. Esta poderosa herramienta, complementaria normalmente, está consiguiendo resolver preguntas que durante mucho tiempo hemos sido como seres humanos incapaces de contestar. Y ahora vemos en ella, por sus resultados sobre todo en el diagnóstico y en el pronóstico, una aliada en una medicina más precisa.
En el caso de la reproducción asistida, ha llegado como un add-on. Así es cómo llamamos a las técnicas complementarias de las que no tenemos toda la evidencia pero su uso puede mejorar el tratamiento de la infertilidad.
La eficacia de la IA depende del procedimiento y modelo utilizado. Actualmente, el uso más extendido de la inteligencia artificial en el laboratorio es para la evaluación y selección de embriones. Hay varios modelos disponibles comercialmente para este propósito, y se comparan entre sí mediante su rendimiento. Con un rendimiento máximo de 1, los modelos actuales oscilan entre 0.6 y 0.8, dependiendo siempre del tipo de paciente.
La selección embrionaria como punto de partida
En el laboratorio de FIV, la inteligencia artificial en reproducción asistida se introdujo por primera vez en 2018 para la evaluación embrionaria. Hace unos seis años, surgieron las primeras herramientas para registrar de manera automática los hitos clave del desarrollo embrionario de forma objetiva.
Gracias a la IA hemos conseguido clasificar y ponderar embriones, priorizando para la transferencia aquellos que implantarían antes. Este hecho ha mejorado objetivamente las tasas de éxito en el tratamiento de reproducción asistida.
El nivel de concordancia entre la inteligencia artificial y el embriólogo es aproximadamente del 70%. Pero lo mejor es que hemos observado que cuando hay acuerdo entre ambos, los resultados clínicos son mejores que cuando se transfiere un embrión que no tiene la puntuación más alta según la inteligencia artificial en reproducción asistida. Todo esto sin olvidar que la IA, como ya decía anteriormente, está considerada una herramienta complementaria, un add-on cuyo objetivo no es reemplazar el criterio humano, sino facilitar la toma de decisiones.
El ranking que proporciona la IA al equipo de laboratorio es de mucho valor a la hora de tomar la decisión final. Sobre eso no tenemos duda a día de hoy.
Algoritmos avanzados que minimizan el fallo reproductivo
La Inteligencia Artificial en reproducción asistida tiene el potencial de ayudar a minimizar el fallo reproductivo. Al utilizar algoritmos avanzados y análisis de datos, la IA puede mejorar la selección de embriones con mayor probabilidad de éxito en la implantación, lo que podría conducir a mejores resultados en los tratamientos de FIV y, en última instancia, a reducir el fallo reproductivo.
Aunque los avances que la IA nos está permitiendo son grandísimos, no podemos perder de vista que estamos en el inicio de su uso. Hasta ahora, contamos con algoritmos capaces de analizar imágenes de embriones mediante visión computacional, sin embargo, en un futuro cercano, seremos capaces de combinar diferentes marcadores embrionarios obtenidos de su incubación in vitro, así como información relacionada con el metabolismo embrionario, las características de cada paciente y las situaciones individuales de cada tipo de tratamiento.
La sinergia de todas las fuentes de información disponibles, junto con el potencial de la inteligencia artificial para analizar los datos, será seguramente lo que nos permita dar un paso de gigante en el éxito de los tratamientos de fecundación in vitro.